Prevé la CEPAL la peor crisis de América Latina
Habrá una contracción económica de -5.3% que dejará sin empleo a millones de personas. Gobiernos deberán buscar o crear alternativas o someterse a organismos financieros.
Rubichelo Monde
Crónica Norte
MONTREAL, 31 mayo 2020.— Según un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), el terrible efecto que la pandemia dejará en las economías de países latinoamericanos será una contracción regional promedio de -5.3% para 2020. Esto, en otras palabras, significa pobreza y desempleo.
Esta crisis, con una caída de -5.3% del Producto Interno Bruto, será la peor en toda la historia de la región. Y para resaltar la gravedad del asunto la CEPAL menciona que la sola contracción comparable es la que se dio en 1930 con la Gran Depresión con un -5%.
Según el documento de la CEPAL, cinco han sido los factores de esta contracción en esta situación de pandemia que son: 1) reducción de las exportaciones, 2) caída del turismo, 3) Desplome de los precios de productos básicos, 4) Temor a invertir y 5) reducción de las remesas.
Las proyecciones de la CEPAL anticipan un aumento de 3.4 puntos porcentuales en la tasa de desempleo que la ubicarían en 11.5%. Esto significa que este año 37.7 millones de personas pasarán este año a engrosar las filas del desempleo.
Este efecto negativo en el ingreso de los hogares generaría 29 millones de personas en situación de pobreza este año, para ubicar esta cifra en un total de 215 millones de personas en la región. En tanto, la pobreza extrema aumentaría 16 millones de personas.
Para superar la crisis, la secretaria ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena, hace un llamado a la “cooperación y solidaridad internacional” y dice que “los líderes del G-20 ‘deben apoyar’ que las organizaciones multilaterales presten a tasas de interés favorables y alivien de la deuda a los países altamente endeudados, aplazándola o condonándola”.
Además la CEPAL propone que los países de América Latina entreguen un ingreso básico de emergencia que garantice una canasta básica de alimentos y otras necesidades durante seis meses a toda la población en situación de pobreza en 2020, es decir a 215 millones de personas. Esto implicaría un gasto adicional del 2.1 del PIB.
Pero estas últimas son sólo recomendaciones de la CEPAL. Nada obliga a los gobiernos de América Latina a dar este ingreso básico de emergencia ni nada obliga a las organizaciones multilaterales llámense Fondo Monetario Internacional y Banco Mundial a que presten a tasas de interés favorables y mucho menos que condonen la deuda a ciertos países.
El futuro lo pintan negro otra vez para América Latina. El resultado dependerá de cada gobierno que deberán escoger en buscar soluciones alternativas que alivien la economía de sus pueblos o someterse a las exigencias de organismos financieros internacionales que hacen del saqueo su modo de vida.
O tal vez la solución venga de la sociedad, una sociedad que piense, actúe y encuentre las salidas que los gobiernos no quieren encontrar.
Vea reporte de la CEPAL: