“La obligación de cumplir con esta política durante la pandemia contradice las propias normas militares que garantizan también la elección de sus miembros en materia de tratamiento médico”, dice Comité externo. Recomiendan levantar castigos a los que no se vacunaron

Redacción Cronica Norte

MONTREAL, 4 agosto 2023.— La política de vacunación durante la pandemia violó los derechos de la Carta de Miembros de las Fuerzas Armadas Canadienses, resolvió un tribunal que forma parte del proceso de reclamaciones militares.

La medidas sanitarias exigía que los integrantes de las Fuerzas Armadas fueran vacunados. Si se negaban, estos eran separados de las filas castrenses de manera obligatoria. Así, los que rechazaron la vacuna fueron acusados de mala conducta, “ lo que contradice las propias políticas militares que garantizan también la elección de sus miembros en materia de tratamiento médico”, afirmó el tribunal.

El Comité Externo de Quejas Militares examina las quejas que le envía el Jefe del Estado Mayor de la Defensa y le remite sus conclusiones y recomendaciones no vinculantes.

En total, se presentaron 157 denuncias ante el Tribunal Independiente en relación con la política de vacunación de los militares, que entró en vigor en el otoño de 2021 y permaneció en vigor durante casi un año antes de aplicarse más estrictamente.

El Comité concluyó que esta política violaba los derechos protegidos por el artículo 7 de la Carta, que garantiza la vida, la libertad y la seguridad de la persona. Concluyó que las restricciones impuestas a esos derechos no se ajustaban a los principios de justicia fundamental.

“La caracterización según la cual los miembros que no desean ser vacunados dan muestras de mala conducta, contradice las propias políticas y declaraciones preexistentes de las Fuerzas Armadas Canadienses que garantizan también la elección de sus miembros en materia de tratamiento médico, escribió Nina Frid, miembro del Comité que redactó el análisis.

El Comité recomienda que se anulen todas las medidas administrativas adoptadas contra los miembros que se hayan negado a vacunarse. En un caso concreto, pide que se autorice a un denunciante a reincorporarse al Ejército.

El general Wayne Eyre, Jefe de Estado Mayor de la Defensa, tomará las decisiones finales en los casos aunque no tiene que seguir estas recomendaciones. El alto jefe militar defendió hasta el final la postura del gobierno federal. En una entrevista concedida a la Presse Canadienne el pasado octubre, tras el levantamiento de esta obligación, el general Wayne Eyre dijo que “los militares debían seguir las órdenes legales y que la negativa reiterada de algunos soldados a vacunarse planteaba cuestiones sobre la aptitud de una persona para servir en uniforme”.

Con información de Radio-Canadá.